"De la pasantía de verano en Brigard y Urrutia me quedaron los mejores recuerdos e increíbles enseñanzas. Me queda la certeza de que dedicarse al derecho es una elección de vida apasionante, retadora e inagotable y un camino donde todos los días habrá nuevos retos y, detrás de ellos, enormes satisfacciones. Me queda también la alegría de haber podido compartir con personas increíblemente talentosas y, simultáneamente, increíblemente amables que nos hicieron sentir bienvenidos y valorados desde el primer día. Por eso, y quizás esto es lo más diciente, no se a dónde se fueron estas 6 semanas. Eso si, me quedo con todas las ganas de seguir convirtiéndome en una gran abogada y persona, como las que conocí, y de volver algún día, a ponerlo en práctica y seguir creciendo. Muchas gracias. "